Bueno pues después de ponerle un parche, pues el año pasado se me había pinchado (aunque creemos que fue Haika que la hincó el diente, pues se pone excitadísima cuando nos ve maniobrar la piragua, quiere subir, o jugar o las dos cosas, que sé yo) ahí me tenéis con mi artilugio navegando en alta mar. Atrás quedan los problemas, atrás queda el mundo entero.
Había algo de viento, y como es de PVC se me va la proa en cada palada, pero mejor, así experimento algo de aventura "Camel Trophy"(jaja). Me costó trabajo regresar pues la corriente me desvió bastante, pero nada, enseguida dominé el tema.
Otro problema es Haika se viene detrás de la barca, pero nada más despacio y nunca sabes si es que no tiene fuerzas o es que es así su ritmo. Ayer se atravesó el río 2 veces (ida y vuelta) y cuando sale del agua, comienza correr por la playa, patrullando infatigable, jugando con los niños, es incansable. Nos agota a nosotros, pero la verdad es que es un espectáculo verla correr, es la atracción del río.
Dice Juan Ignacio que no compensa por el tiempo que empleo en inflarla, limpiarla, desinflarla, pero cuando algo te gusta no te importa el trabajo, y cuando estás en medio del río te sientes en otra dimensión, supongo que si alguien me lee y ha hecho piragüismo sabrá a lo que me refiero.
5 comentarios:
la verdad es que disfrutas un montón con tu kayak, mami... da gusto verte tan feliz!!!
Si, la verdad es que son momentos despreocupados y deportivos cien x cien.
A MIS HIJOS LES ENCANTA!!!
QUE BUEN EJERCICIO PARA LOS BRAZOS!!!
gloria (mex.) es un placer de dioses, ahora los colores son intensos y la brisa es tibia cuando te acaricia navegando por tu rostro.
Que gozada.Me alegro que disfruteis con la canoa.El lugar me recuerda momentos bonitos.
Estais hechos unos deportistas.
Saludos MIRESA
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