Recorrido por el Madrid de la época Franquista

Empezamos el paseo en Plaza de España. Al acabar la contienda civil, el nuevo régimen necesita una nueva arquitectura que le engrandezca y legitime, y en los antiguos solares de conventos y de la pl. san marcial que ocupan la pl.  de España  se construyen los rascacielos del Edificio España y la Torre de Madrid. Los arquitectos Otamendi emplearán ladrillo rojo  con piedra blanca a los lados y un escalonamiento lateral para darle algo de estética y movimiento (hoy está cerrado y se encuentra en restauración). Tiene 25 pisos y 117 m. de altura y cuando se inauguró en 1953 era de los más altos del mundo, de Europa y de España.

La gitanilla, personaje literario 

 Dulcinea del Toboso, la amada de don Quijote de la Mancha

Dª Aldonza 

Al cumplirse los 300 años de la muertes de Cervantes se convoca un concurso que ganan los arquitectos P. Muguruza y R. M. Zapatero con el escultor L. Coullaut-Valera. Este será uno de los monumentos más fotografiados por todos los millones de turistas que llegan a Madrid. Hay que añadir que colaboraron todos los países hispano parlantes, y que están representados en los escudos de la fuente:

 "Las figuras de honor en el monumento representan a Cervantes, sentado bajo un pedestal, con las estatuas en bronce de Don Quijote y Sancho Panza cabalgando respectivamente sobre Rocinante y su acostumbrado jumento, en la base del monumento principal.

Está coronado con una bola del mundo y los cinco continentes, alegoría de la difusión de la lengua española por todo el mundo. Entre otras esculturas se encuentran la Realidad y la Ficción. Por la parte trasera del monumento se representa a Isabel de Portugal y la fuente se desliza por los escudos (actualmente muy desgastados) de todos los países donde se utiliza la lengua de Cervantes. Se representa también a un indio en la tradición de Alonso de Ercilla y su La Araucana y a Perseo, que representaría la lírica clásica.

Durante los años 30 el monumento sufrió un parón considerable, no siendo reiniciado hasta los años 50, cuando el hijo del escultor ganador del concurso, Federico Coullaut-Valera, completó el monumento añadiendo las figuras de Dulcinea y Aldonza Lorenzo, y posteriormente (1960), los grupos de Rinconete y Cortadillo y de La Gitanilla.

 Este magnífico edificio que flanquea el final de la plaza pertenece a la Compañía asturiana de minas y es de propiedad holandesa. Sigue con la tradición del ladrillo español, piedra blanca de Colmenar, chapiteles y una bonita herrería en los balcones.

y para no ser menos este hermosa construcción  remata por el lado contrario, lo construyeron las hermanas Gallardo y su arquitecto es francés con claras influencias Art decó. 

Mañana seguiré con la calle Princesa por la que seguiremos el recorrido de esta interesante parte de Madrid.