Nuestro ciclista explorando el camino, al fondo los acantilados del camping, a la izqda. la llanura aluvial convertida en campo de golf, las aves no me fueron propicias, pero haberlas "hailas".
El arenal y el río, con las montañas de Zarauz, el día no estaba muy claro, pero al menos no llovía....
Llegando a la costa, por fin el río encuentra su final; y nosotros seguimos, Guetaria en lontananza y el tan fotografiado ratoncito (miles de veces)
Y con un solo giro, el paisaje cambia y varía a fluvial, con su fauna diferente y paisaje distinto.
La playa inmensa : "más inmensa sin ella"... que diría Neruda, la temperatura era agradable, las dunas protegidas ¿de quién, del viento?.
Y la sorpresa del día, el parapente intentando remontar, no lo conseguiría, pero estuvo en ello un buen rato.
arriba, arriba, casi, casi.....y es que el viento soplaba hacia el interior.
Me gusta mucho este encuadre, la forma de la rejería, la mirada al horizonte infinito, allende los mares.....
3 comentarios:
Son preciosas, no se si con mejor tiempo serian mas bonitas. Besos A.
qué bonit<as fotos mamá!! te quiero mucho <3
Por fin, veo el ratón, perfecto... al ciclista, sabiendo lo de la mini bici.
Me queda el saber, en la foto del río y las piedras, no sera Juan Ignacio el que esta sentado, que se ve a lo lejos? O no se que es...... besos A.
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