LINARES (Jaén)

A veces la vida te da agradables sorpresas, me refiero a un encuentro inesperado que te trae experiencias agradables y calor en el corazón. Eso fue lo que experimentamos en Linares, unas sensaciones inolvidables. Íbamos a celebrar un funeral en memoria de mi suegra y nos recibió toda la familia linarense, enseguida se estableció una corriente de simpatía mutua como si nos conociéramos de toda la vida, aunque había personas que no nos habíamos visto nunca. Nuestro agradecimiento a estas estupendas personas, más allá del ámbito familiar, más allá de todo título o etiqueta. 

 Linares es una ciudad con una historia antiquísima, me decía nuestro primo "desde que el tiempo es tiempo", situada en Jaén, en Sierra Morena. Su rasgo más sobresaliente y por lo que se le conoce en el mundo es por la minería.    

Los restos más importantes arqueológicos se encuentran en Cástulo, donde desde el Neolítico hasta la dominación romana se explotaron sus ricos yacimientos de cobre, plomo y plata.

Entrañable el paseo al santuario de Ntra. Sra. de Linarejos, patrona de esta bonita ciudad, que bien merece una visita pues sus calles y plazas nos prendieron en la solapa su elegancia y su historia.

 En la Edad Media apareció como "leñares de Baeza", pero  :"A mediados del siglo XIX, con la introducción del maquinismo y el capital extranjero, es cuando Linares da el salto, cualitativa y cuantitativamente, más grande de su historia. En unas décadas multiplica su población y obtiene el título de ciudad, que le otorga, en 1875, Alfonso XII. El producto de sus entrañas comienza a cotizar en la bolsa de Londres y la ciudad experimenta una impresionante transformación urbana. Se convierte en un bullidero de gentes venidas de cualquier parte, con la esperanza de una vida mejor. Ve abrir delegaciones diplomáticas de Reino Unido, Francia, Alemania y Bélgica."

Busto en el que se conmemora la trágica muerte del mítico torero  "Manolete" en el ruedo de Linares.

Fachada del hospital de los Marqueses de Linares

Mosaico señero y popular entre la gente, es muy visitado y siempre estará en nuestra memoria.

Otro recuerdo que nos trajimos fue el bonito paseo de Linarejos con sus bancos decorados con cerámicas de fotos antiguas y que lo convierten en un monumento a su gente. Actualmente la economía está dedicada al comercio e industria. El torneo de ajedrez también es muy famoso a nivel mundial pues participan los grandes campeones de todos los países. 

Los alrededores poseen parajes de gran belleza Los ríos Guadalimar y Guadiel, ambos afluentes del Guadalquivir, le dan además de paisaje buen regadío para su gastronomía que esta especializada en tapas con el mejor aceite de oliva del mundo, y qué decir de las aceitunas aliñadas o de las sabrosas ensaladas, no quiero dejar de hablar de sus platos más celebrados como las gachas, migas, gazpacho, ajo blanco y un sinfín de ellos que haría interminable este párrafo. Se me hace la boca agua al recordarlo. 

Pero lo mejor de Linares serán nuestros primos, será los buenos momentos que pasamos charlando de mil cosas, deteniendo el tiempo, intentando recuperar todo lo perdido. Prometemos volver a repetirlo y que no se pierda esta entrañable amistad. 


Las fotos son de wiki