LAS CAMPAS DE URBIA EN AIZKORRI

Hoy queríamos hacer una buena marcha por la nieve, ¿donde ir? al Pirineo?. No, no, ir a Aizcorri (hacia el suroeste)que allí hay nieve. Pues nada nos pusimos en marcha y ¿qué nos encontramos? NIEBLA por doquier.

Así estaba el bosque de hayas cuando quería salir el sol.

El Amboto emergiendo desde un mar de nubes
Cuaando llegamos a las campas de Urbía, nos esperaba un valle de alta montaña,
amplio, muy verde rodeado de crestas rocosas.

La marcha ha merecido la pena. Al fin veíamos el sol.

Los neveros adornaban el verde de los prados.

Cuando nos disponíamos a atacar nuestro objetivo, y tras subir por una empinada ladera, con el camino lleno de "chocolate" -lodo escurridizo-, vemos venir de frente la niebla que nos había acompañado todo el camino. Poco a poco iba invadiendo el valle. Apenas hemos terminado el bocadillo de sardinas -tan rico, después de la caminata- y nos hemos apurado para regresar antes de que nos cubriera.

Al fondo los molinos de viento destacando en la niebla.

Había una ermita totalmente tapada por la densa niebla. Ahí estaba la entrada al valle, por donde habíamos entrado y teníamos que regresar. Al final tuvimos nuestra aventurilla. Nos cayó escarcha, granizo, lluvia, nieve para la que no estábamos preparados. Pero así es la montaña, imprevisible, difícil de conquistar.