Cada noche el director del crucero sugería un tema para la vestimenta, podía ser blanca, informal, años 70, tropical, improvisamos como podíamos, pero la noches siempre eran animadas, y los musicales en el gran teatro eran de un alto nivel, tanto coreografía, músicos, bailarines, vestuario....una gozada.
Uno de los grandes momentos del crucero era ver desatracar el barco y alejarnos de sus costas, era un espectáculo y desde la cubierta final teníamos una posición privilegiada.
La cerámica tiene una gran importancia para el comercio griego, en ella se envasan sus productos aceite, vino y trigo, que luego se llevaron por todo el Mediterráneo.
En España llegaron también sus famosas naves trirremes con tres hileras de remos que las hacían tan veloces. Rosas, Denia, Valencia a todo el levante español fundando colonias....
Los atardeceres eran un momento mágico y todos nos apostamos con las cámaras para despedir al gran astro. Se aprecia la calima que venía de África con el polvo amarillo en suspensión....También Asia estaba muy cerca. Estas islas han sido dominadas por el imperio Otomano y están siempre al acecho los conflictos con los vecinos turcos. Por cierto Kalimera es el saludo griego.
Proliferan las iglesias ortodoxas, con su iconografía peculiar. |
La preciosa rada que bordea la bahía de Chania |
La mezquita jenízara, de gran
valor histórico.
El barrio veneciano, detrás del puerto, lleno de encanto y fundado por los navegantes venecianos que utilizaron esta isla como base para pasar a otros continentes.
Las altas montañas de Creta nos despiden. En el interior llegan a más de 2400 m. y las llaman montañas blancas.
Y la diversión estaba asegurada, en cubierta, al lado de la piscina, un buen equipo de animación, éramos los primeros en salir a la pista a bailar...aún me duran las agujetas...jajaja, muy buenas las bandas y los cantantes, y los bailarines ¡que cuerpos¡¡¡
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